19 de mayo de 2011

El del Diario del DK (I)



Día -50: Bastión de Acherus. Base de los Caballeros de la Muerte. Mi hogar. El jefe Arthas me entrena en persona. Que tío más guay. Estoy haciendo muchos avances en mi instrucción, y mi nombre resuena entre asombrados murmullos de la Ciudadela de Acherus. Soy poderoso. Soy Icaronte, el Caballero de la Muerte.

Día -20: Soy todo un héroe entre los míos. Soy temido por la misma Parca. He repartido muerte y destrucción a mi paso. Los campesinos huyen aterrorizados al verme. Soy imparable. Mis habilidades en la batalla salen sin pensar. A uno de los humanos lo mato sólo con mirarle.

Día -1: El jefe Arthas me felicita por mis habilidades. Razuvious esta orgulloso de mí. Mograine me alaba en persona. Thassarian y Koltira quieren invitarme a hidromiel todos los días. Soy uno más de la pandilla, pero soy el mejor. Me han encargado que ataque la Capilla de Esperanza de la Luz. Aniquilaremos a los vivos. Hoy será un gran día.

Día 0. Mograine la ha liado parda. En medio del combate se ha dejado capturar, el muy inútil. Ha tenido una visión o un recuerdo de cuando era un adolescente salido... y ha empezado a hablar como un blandengue. Menos mal que ha venido el jefe Arthas para aniquilar a estas ratas. Yo ya me veía salvado, pero va a ser que el imbécil de Mograine se le ha ido de nuevo la olla, y le ha dado su espada a Tirion Vadín, que ha conseguido herir y asustar al jefe Arthas. El Rey Exánime se ha ido, y nos ha dejado ahí. Solos.



Día 0: Sí, otra vez, ha sido un día largo. Nos hemos quedado todos mirándonos, jadeando. Me echo un ojo a mí mismo. Mi espada esta ensangrentada, chorreando sobre los cadáveres que antes la tenían dentro y sobre la tierra muerta. Estoy rodeado de los supervivientes de nuestra masacre. Estamos indefensos, en minoría... Hoy será el fin. Pero no... ¡Nos dejan ir! Estos vivos están gilipollas...

Día 0: Que día más largo. Los vivos nos han dejado volver a nuestra fortaleza de Acherus, pero se ha liado un motín. Por suerte me tienen a mí (otra vez) para salvar la papeleta. ¿Y ahora que hacemos? Dicen que nos unamos a la Alianza o la Horda, y que luchemos contra el jefe Arthas. ¿Pero qué mosca les ha picado? ¿Alguien me ha preguntado a mí? ¡Arthas es un tío guay! ¡Es mi ídolo! ''Yo era su favorito!! Quiero que me lleve con él... ¿Por qué no me llevó? Necesitará un ejército para su Corona de Hielo... Estoy perdido. Tras la fase negación, depresión, aceptación... decido coger el Portal a Orgrimmar.

Día 1: Llego a Orgrimmar. Esto va a ser duro. Los guardias me insultan. Los niños me tiran fruta podrida. Las mujeres escupen el suelo por el que paso. Quiero matarlos a todos y comerme sus corazones. Me controlo. Intento llegar a la sala de Garrosh rápidamente. Es un orco extraño, pero me ha caído bien. ¡Abla komo yo oyga! Y tiene un narcisismo casi tan grande como el mío. Me ofrece un sitio en su ejército de sucios orcos, sucios trols, sucios taurens, sucios goblins, sucios no-muertos y apestosos elfos. Afortunadamente no tengo sentido del olfato desde que me revivieron en la tumba. Acepto la oferta. Me dan mi carnet de la Horda. (Mis manos han empequeñecido incomprensiblemente un poco).



Día 2: Esto parece la vuelta a la Universidad de Lunargenta. Tengo un encargo de Garrosh para que vaya a Terrallende a no se qué... pero debo estudiar y hacer deberes. Los instructores dicen que hasta que no esté preparado, no me aconsejan ir a Terrallende. Me tienen despellejando animales, estudiando plantas... cocinando. ¡Yo lo que quiero es matar cosas!

Día 5: Sigo estudiando plantas y despellejando animales. Tengo pesadillas con flores y abrigos de ardilla. Necesito sangre. Acabo de salir de las tierras de Arthas, necesito aún saciar mi sed de violencia. Me apunto a una lista de reclutamiento para ir a luchar junto a mis nuevos "hermanos" de la Horda en el frente de batalla. Interminables horas después, me reclaman para la batalla.  La sangre me hierve como sólo lo hace en los minutos previos a una muerte casi segura. Demostraré quien soy. Era el favorito de Arthas, estos nuevos compañeros besarán el suelo por el que piso. Me siento poderoso, único, indestructible. Espera... 1... 2... 3... 5... 8... Pero que...¿? ¡¡Pero si somos todos Caballeros de la muerte!! ¡¡Y llevan mi armadura, y mi espada!! ¡Arthas dijo que se había forjado especialmente para mí!... Maldito Arthas... ¡Lo odio! Juro que lo mataré en su Trono Helado. Ahora sí que juro luchar junto a la Horda.

Día6: Me duele todo. La batalla fue bien, pero yo no fui el héroe. Mis habilidades no son tan efectivas ahora. Cuando estaba bajo el mando de Arthas creaba muerte por doquier. Aquí los enemigos me hieren, y no se cómo enfrentarme a ellos. Creo que no causé ninguna baja en toda la batalla. Eso sí, me lo pasé muy bien jugando a "atrapa ese cordero con el lazo". Como todos los demás Caballeros de la Muerte. Sólo se veían enemigos volando de un sitio para otro.

Día 10: Estoy hasta las runas de recoger flores y desollar bestias. Mi espada esta oxidada por los viajes a la intemperie.

Día 20: Pienso en el suicidio. Error. El haber venido de la muerte una vez hace que no haya forma física de suicidarme. Intento clavarme la espada, pero mi falta de flujo sanguíneo hace que no sirva de mucho. Intento ahogarme, pero mis pulmones no necesitan aire. Intento tirarme desde la piedra más alta de Orgrimmar, pero un maldito ángel me devuelve a la no-vida, junto con un ticket de descuento para armaduras abolladas.

Día 23: El suplicio ha terminado. Mis instructores me informan que ya estoy preparado para atravesar el Portal Oscuro. Me dirijo raudo y veloz, no he de perder tiempo, hay gente que me necesita. Terrallende, allá voy.

2 comentarios:

  1. ¡Qué grande!, mola mucho el relato de tus primeras experiencias con el "temido" Caballero de la muerte... aunque siento lo de tus manos, debe ser una grave pérdida que durante mucho tiempo vas a echar de menos xD.

    Y bueno, con lo del resto de asquerosas razas, siempre te quedarán los Renegados, molamos mogollón y somos lo más parecido a vosotros. Además, cuando nadie mira pegamos mordiscos a los trolls, como se regeneran y tal no se dan cuenta de si han perdido un trozo de brazo =D~.

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  2. tenia entendido que el Dk a niveles bajos se juega solo con aporrear botones XD
    Suerte con tu nuevo proyecto ^.^

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